Fellinia: Como surgió la idea de realizar el documental?
Iván: Surgió luego de que defendiera mi tesis de doctorado sobre la memoria de la colonización judía. Uno de los capítulos de ese trabajo indaga en la colonia Moisés Ville, por lo que estuve viajando al pueblo durante cuatro años. Ese trabajo me abrió las puertas de la comunidad.
Melina: Ivan y yo nos conocimos en El Centro de Documentación e Información sobre Judaísmo Argentino, Marc Turkow. Allí compartimos horas de trabajo y él me comento que quería hacer un documental sobre Moisés Ville. Yo había tenido la oportunidad de ver muchas fotos de Moisés Ville, históricas, del pasado. Y esto fue algo clave porque estimuló mi curiosidad por el pueblo. Además, yo ya habia realizado otro documentales, entonces tenía conocimientos sobre el lenguaje audiovisual para aportar desde ahi en el proyecto.
Fellinia: Como se planteó la experiencia de la co-dirección?
Iván: Yo la busqué a Meli porque quería asociarme con alguien que supiera de cine. Aunque tenía claro qué quería contar, no podía resolver cuestiones estéticas y narrativas con una cámara. Y así nació una sociedad muy productiva, en la que ambos opinamos sobre todo, siempre con argumentos, hasta llegar un acuerdo general en la isla de edición.
Melina: En un principio mi trabajo fue traducir lo que Iván había escrito en su tesis. Había ideas claves que él quería trabajar y que fueron hilando la estructura. Entonces, fuimos descubriendo en el pueblo esas ideas traducidas en lenguaje audiovisual. Algunas cosas fueron surgiendo ahi, en el hacer, y cuando volviamos acá las ibamos re-pensando.
Fellinia: Como se resolvieron los problemas de sonido y fotografía?
Iván: en ese aspecto contamos con dos jóvenes profesionales que hicieron un trabajo excelente: Sol Miraglia y Andrés Radulovich. Yo no tuve ni que pensar en esas cuestiones, lo me liberó espacio y tiempo para dedicarme a producir, guionar y, sobre todo, editar, que fue lo que más me gustó.
Melina: Trabajamos con un equipo técnico. Yo estaba mucho con la Directora de Fotografia (Sol Miraglia) en el rodaje, en cuestiones composición de encuadres y atentas a situaciones que sucedían. Andrés fue nuestro compañero fiel en tomas de sonido. Fuimos un muy buen equipo, siempre muy en consonancia. Luego la etapa de edición fue un trabajo arduo y muy enriquecedor. El trabajo Emiliano Serra como editor fue clave. Fué el puente entre dos miradas en general parecidas pero a veces no tanto, entonces llegar a puntos medios.
Fellinia: Que problemas implicó la producción en la Villa?
Iván: El único problema fue que, al filmar con gente muy mayor, a veces estaban mal de salud y no podían participar. Y no estaban a la vuelta de la esquina, sino a siete horas en auto de Buenos Aires. Por lo demás, todo fue muy amigable.
Melina: Coincido.
Fellinia: Como fué la interacción con los habitantes?
Iván: Fue excelente. Todos estaban super bien predispuestos a participar
Fellinia: La realización dejó afuera algún aspecto de la investigación?
Iván: Muchos! Pero siempre digo que le película es una invitación para quienes estén interesados en ahondar en esa historia. Mi libro Recuerdos de Moisés Ville vendría a ser una suerte de «extended version» de la peli.
Melina: Yo diría que muchisimo! Porque lo cierto es que el docu no podía contener toda la información que Iván había investigado, son otros lenguajes, son «lectores» diferentes los que acceden a una tesis que los que miran un documental; entonces buscamos puntos nodales que fueran potables para contar y el resto, para el curioso, esta internet, el libro de Iván o mismo Moisés Ville.
Fellinia: Cual es la percepción de los segmentos jóvenes de la población con respecto a la preservación de las costumbres?
Iván: Es muy positiva. Gracias al trabajo que vienen realizando los adultos, se ha generado una conciencia respecto de estar en un sitio histórico para la colectividad judía de la Argentina. Hay dos costumbres judias que sobreviven: la gastonomía, sostenida por panaderías y rotiserías, y los bailes hebreos, ya que hay un taller de ricudim al que asiste gente de distintos credos.
Entrevista: Oscar Alvarez